Son casi las 7 de la mañana (lo cual significa que son casi las 8 de la mañana en Finlandia). No he logrado volver a quedarme dormido y me siento cansado y triste. Y tengo casi 12 horas de viaje frente a mí. Y me di cuenta de algo: Lucía seguramente ya tomó la decisión de terminarme. Los signos están ahí, claros. Está el hecho de que Niño me dijo que habló con ella al fin de semana (!) y le dijo que tomara decisiones con la cabeza fría. Parece que la decisión fue tomada (así fuese con la cabeza caliente) hace días. Está el hecho de que cuando le dije a Lucía que es una mierda estar así en un país desconocido, solo, en una habitación de hotel y que sé que ella también está sola pero que al menos está en casa, ella dijo que era mi casa (a pesar de que me he esforzado por hacer de esa casa nuestro hogar). Está el hecho de que en un punto, cuando estábamos conversando por teléfono y dijimos que teníamos que hablar, ella sugirió que teníamos que hablar de cómo hacer con sus cosas, que tenía que llevárselas y blah. Está el hecho de que haya sugerido que no quiere que vaya a Inglaterra para su viva, así sigamos porque igualmente vamos a terminar. La decisión parece que ya fue tomada, así después de 5 minutos de haber colgado y decir que hablaríamos solo hasta que yo estuviera de vuelta en Jyväskylä ella me hubiera llamado de vuelta a decirme que no quería eso y que dijo cosas (por ejemplo, "we had a good run") por cómo se sentía (se siente) en el momento. Y lo sé... sé que yo soy el que le digo a ella que me molesta que esté asumiendo cosas de mí sin preguntarme, y ahora yo estoy asumiendo cosas de ella sin preguntarle. Pero es que es clarísimo. Yo sé que parte del origen de todo esto son sus propias inseguridades que, según ella, no son mi problema (pero es que las está haciendo mi problema). Y no es justo eso. No es justo que todo colapse así cuando he hecho casi todo de la mejor manera que he podido. No es justo que yo soy el que reciba esto.

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